La Cofradía del Rescate daba por concluida su procesión de 2011 al filo de las 1 de la madrugada del ya Miércoles Santo antequerano, momento en el que el trono del Rescate se encerraba en la iglesia de la Trinidad. Instantes antes, hacía su entrada en el templo trinitario la Virgen de la Piedad con la amenaza de la lluvia presente desde la llegada de ambos tronos a la Cruz Blanca, escenario del habitual encuentro entre los Sagrados Titulares de la cofradía y de las tradicionales saetas desde un balcón.
Una hora transcurrió desde que el trono del Rescate llegaba a la Cruz Blanca (se aceleró el paso por Lucena) hasta que se encerraba rodeado de una multitud de gente que esperaba también el habitual encuentro dentro de la iglesia, encuentro que no se pudo producir como medida de precaución por las obras que se están llevando a cabo en los tejados de la iglesia.
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